LA MALA CIENCIA FAEC tiene el placer de ofrecer a sus lectores la traducción de una extraordinaria página dedicada a la reeducación de las ciencias. Como dice su mentor, Alistair B. Fraser, "Encuentro que la educación de las ciencias es bastante fácil. No tengo dificultades con la educación de las ciencias; mis dificultades están en la reeducación de las ciencias. Si yo puedo enseñar algo que los estudiantes jamás han escuchado hablar, encuentro que ellos lo reciben con agrado y lo comprenden. Es cuando tengo que enseñar algo que los estudiantes han aprendido incorrectamente, es cuando comienzo a identificarme con Sísifo.
Preámbulo
Esta página está mantenida por Alistair B. Fraser en un intento de sensibilizar a maestros y estudiantes sobre ejemplos de mala ciencia que a menudo se enseñan en escuelas, universidades, y son ofrecidas en artículos populares y hasta en serios libros de texto.
Aquí, explico lo que yo entiendo por mala ciencia y proveo punteros a páginas especializadas sobre mala ciencia dentro de varias disciplinas. En particular, esta página apunta a Mala Meteorología , una página también mantenida por Alistair B. Fraser.
Este sitio no acepta pedidos para recirpocidad de links, aun si esos pedidos vienen en la forma de un supuesto premio. Las decisiones editoriales no serán influenciadas por pedidos de tal clase de arreglos quid pro quo .
Sin embargo, con gusto pondré links a otros sitios que exploran los mismos temas pedagógicos de la mala ciencia.
Cuando creé esta página en enero de 1995, yo esperaba ingenuamente que otros maestros frustrados correrían a construir sitios en la web dedicados a, digamos, Mala Arqueología, o Mala Biología. No ha sucedido. Aparentemente, la mayoría de los maestros creen en todo lo que enseñan. [Suspiro] Uno se acuerda de Lily Tomlin cuando ella dijo , “No importa lo cínico que uno se torne, nunca es suficiente"
Las páginas sobre Mala Ciencia y Mala Meteorología han sido citadas en más de 3000 otros sitios web, en libros, revistas, y en la TV.
¿Qué es Mala Ciencia?
Estudio encuentra a los libros de texto
sobre ciencia repletos de errores
Este estudio va bien más allá de la mala ciencia para incluir mala ediciones y los incapaces comités de libros de texto que están más interesados en usar a los libros de ciencia como vehículos para la corrección política que para la corrección científica.
Una copia de este estudio está disponible en: Review of Middle School Physical Science Texts
(por lo menos en el contexto de esta página)
La Mala Ciencia abunda y viene en varios disfraces. Esta página sale al ataque de sólo una clase: fenómenos bien entendidos que son presentados presistentemente presentados de manera incorrecta por escriotres y maestros, presumiblemente porque no saben otra cosa, o porque no les preocupa realmente hacerlo de manera correcta. Al publicar ejemplos de mala ciencia, tengo la esperanza de sensibilizar a estudiantes, maestros y escritores sobre los horrores de tales erradas explicaciones o representaciones.
Lo que esta página NO es.
Para el propósito de esta página, mala ciencia no quiere decir "pseudo-ciencia". Me doy cuenta de que las fronteras son permeables, pero existe una útil distinción. Los practicantes de (lo que los científicos se refieren como) pseudo-ciencia, generalmente conocen y hasta entienden el pensamiento científico establecido; ellos simplemente lo rechazan (por razones que pueden llegar a tener muy poco que ver con la cienca misma). Tratamientos de las pesudo-ciencias y lo paranormal son bien tratados en otras partes. Vea, por ejemplo, el Skeptical Inquirer , o el Skeptics Society . En contraste, los seguidores de la mala ciencia son generalmente maestros o escritores que no saben nada mejor.
Similarmente, esta página no trata las controversias contemporáneas, en las que los expertos están aún en activo debate. Más bien, se concentra en ideas y hechos que están bien establecidos y bien comprendidos, pero que se persiste en presentarlos incorrectamente.
En tanto a ello, esta página es más sobre enseñar que sobre investigar.
La dificultad con la educación de las ciencias,
es que mucho de ella es en realidad reeducación.
Encuentro que la eduación de las ciencias es bastante fácil. No tengo dificultades con la educación de las ciencias; mis dificultades están en la reeducación de las ciencias. Si yo puedo enseñar algo que los estudiantes jamás han escuchado hablar, encuentro que ellos lo reciben con agrado y lo comprenden. Es cuando tengo que enseñar algo sobre lo que los estudiantes lo han aprendido incorrectamente, cuando me comienzo a identificar con Sísifo.
¿Por qué la reeducación de la ciencia es tan difícil? he identificado dos posibles razones, usted puede conocer otras.
- Jonathan Swift is famoso por haber dicho (no puedo encontrar la referencia original), "Usted no puede hacer razonar a una persona para sacarla de una postura en la que que ella no ha razonado primero para ponerse." De modo que, si la ciencia es enseñada como una colección de (supuestos) hechos, no es nada más que dogma. Los dogmas resisten porfiadamente al subsecuente desplazamiento por la razón.
- Parece ser que todo lo que la gente ha aprendido antes de la pubertad toma el status de una verdad inmutable (esto lo comprenden muy bien los padres, religiones y gobiernos). Cualquiera de las explicaciones racionales sobre por qué algunas creencias previas podrían ser incompatibles con el comportamiento de la naturaleza, y una cuidadosa explicación del actual comportamiento de la naturaleza, son casi totalmente inútiles.
Entonces, si la ciencia es enseñada como dogma al prepúber, sólo imagínese el problema creado para los subsiguientes maestros. Por ejemplo, la mayoría de los estudiantes universitarios que encuentro han sido enseñados cuando niños que la razón por la cual las nubes se forman cuando el aire es enfriado, es que el aire frío no puede contener tanto vapor de agua como el aire caliente. Cuando cuidadosamente explico lo que realmente sucede, y demuestro que el nostrum previamente aprendido es tontería marchando disfrazada de ciencia, sólo puedo convencer a una pequeña fracción de la clase. El resto sabe, profundamente en su corazón, que su maestra de sexto grado, digamos, o su mamá, estaba realmente en lo cierto y que uno no es nada más que un contrera que intenta destruir el orden establecido. El daño ha sido hecho, la mente está congelada, y el dogma infantil dura toda una vida.