Al combinar registros de temperatura obtenidos de anillos de árboles, núcleos de hielo, corales y las pocas medicio-nes registradas en el registro histórico, Shindell y su equipo ilustran claramente en esta imagen el impacto significa-tivo que tuvo el Gran Mínimo Solar: la diferencia de temperatura entre 1680, un año en el centro del Mínimo de Maunder, y 1780, un año de actividad solar normal, según lo calculado por un modelo de circulación general, es absoluto.
El azul profundo en el este y centro de América del Norte y el norte de Eurasia ilustra dónde fue la mayor caída de temperatura. Casi todas las demás áreas terrestres también fueron más frías en 1680, como lo indican los diferentes tonos de azul. Las pocas regiones que parecen haber sido más cálidas en 1680 son Alaska y el Océano Pacífico orien-tal (izquierda), el Océano Atlántico norte al sur de Groenlandia (izquierda del centro) y el norte de Islandia (centro superior) - las similitudes con hoy son sorprendentes.
Sin embargo, la energía del Sol disminuyó solo un poco durante este tiempo, incluso en las profundidades más pro-fundas del Mínimo de Maunder, la irradiancia solar alcanzó un mínimo de aprox. 1,363 W / m2 desde su máximo previo mínimo de aprox. 1,367 W / m2 - no es una gran diferencia, entonces, ¿por qué las temperaturas caye-ron tan severamente en todo el hemisferio norte?
Para responder a esa pregunta crucial, Shindell y su equipo tomaron la cantidad de energía proveniente del Sol durante el Mínimo de Maunder y la ingresaron en un modelo de circulación general. El modelo es una representación matemática de la forma en que varios sistemas de la Tierra (temperaturas de la superficie del océano, diferentes capas de la atmósfera, energía reflejada y absorbida de la tierra, etc.) interactúan para producir el clima.
Cuando el modelo comenzó con la disminución de la energía solar y devolvió temperaturas que coincidían con el registro paleoclimático, Shindell y sus colegas sabían que el modelo mostraba cómo el mínimo de Maunder podría haber causado la caída extrema de las temperaturas. El modelo reveló que la caída de la temperatura estaba rela-cionada con el ozono en la estratosfera, la capa de la atmósfera que se encuentra entre 10 y 50 kilómetros de la superficie de la Tierra. El ozono se crea cuando la luz ultravioleta de alta energía del Sol interactúa con el oxígeno. Durante el Mínimo de Maunder, el Sol emitió luz ultravioleta menos fuerte, y así se formó menos ozono. La disminu-ción en el ozono afectó las ondas planetarias, el gigante se mueve en la corriente de chorro que estamos acostum-brados a ver en los informes meteorológicos de la televisión.
El cambio en las ondas planetarias llevó a la Oscilación del Atlántico Norte (NAO), el equilibrio entre un sistema permanente de baja presión cerca de Groenlandia y un sistema permanente de alta presión hacia el sur, en una fase negativa. Cuando el NAO es negativo, ambos sistemas de presión son relativamente débiles. En estas condiciones, las tormentas de invierno que cruzan el Atlántico generalmente se dirigen hacia el este hacia Europa, que experi-menta un invierno más severo. (Cuando la NAO es positiva, las tormentas de invierno siguen más al norte, haciendo que los inviernos en Europa sean más suaves).
Los resultados del modelo ilustran que el NAO fue más negativo en promedio durante el mínimo de Maunder, y Europa permaneció inusualmente fría.
Estos resultados coincidieron exactamente con el registro paleoclimático.
El moderno Gran Mínimo Solar "Eddy"
Con el Sol una vez más apagándose, relativamente , otro evento de enfriamiento global inducido por el sol nos está mirando a todos.
Los años entre 1650 y 1710 fueron un momento difícil para estar vivo. El mínimo de Maunder extendió efectiva-mente los meses de invierno, entregando lo que a menudo era un clima ártico a las latitudes medias. La nieve del verano se convirtió en un lugar común, y con las heladas asociadas vino la destrucción de muchas cosechas. La escasez de alimentos pronto condujo a disturbios civiles, que a su vez rápidamente llevaron a la hambruna y a la eliminación del velo frágil que es la sociedad - se produjo el caos.
Preste atención a las advertencias del pasado.
No caiga en la falsa -alarmista agenda política calenturienta del día - los órganos políticos no tienen la espalda.
Prepárese para el FRÍO: conozca los hechos, muévase si es necesario y cultive sus verduras.
Los TIEMPOS FRÍOS están regresando, las latitudes más bajas se están CONGELANDO, en línea con una activi-dad solar históricamente baja, rayos cósmicos nucleantes de nubes y un flujo de corriente de chorro meridional.
Incluso nuestros amigos de la NASA parecen estar de acuerdo, y su pronóstico para este próximo ciclo solar (25) lo ve como "el más débil de los últimos 200 años":
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