Hubo una reunión en Concordia. Forestales sostienen que Botnia cumplirá con estándares internacionales. El secretario de la Produc-ción, Daniel Welschen, asumió que "se va a instalar en Corrientes una fábrica como la proyectada por Botnia”.
En un encuentro forestal organizado por la Delegación Concordia del Instituto Nacional de Tecnología Agroalimentaria (INTA), productores y empresarios defendieron la instalación de industrias de celulosa en la región, en contraposición con la postura del gobierno provincial de Entre Ríos que ha realizado una abierta oposición a la instalación de las plantas de pasta de celulosa en Fray Bentos.
María Cristina Área, del Programa de Investigación de Celulosa y Papel de la Universidad Nacional de Misiones, destacó el proyecto Botnia y aseguró que cumplirá con las máximas exigencias internacionales en materia ambiental.
En tanto, el licenciado Gustavo Braier se refirió a las perspectivas del sector forestal de Corrientes y Entre Ríos, la percepción de los inversores, y las debilidades que se enfrenta como país ante la falta de un plan nacional para impulsar una política de promoción de la actividad. Por su parte, el secretario de la Producción, Daniel Welschen, expresó que “asumimos que se va a instalar una fábrica como la proyectada por Botnia, en la provin-cia de Corrientes”.
Unas 400 personas participaron este jueves de la vigésima edición del clásico encuentro forestal organizado por el INTA de Concordia y la Asociación de Ingenieros Agrónomos del Nordeste de Entre Ríos (Aineer), del que participaron productores y empresarios y por primera vez defendieron la instalación de industrias de celulosa en la región.
En el marco de una jornada de camaradería e intercambio de información entre los distin-tos integrantes del sector forestal, la polémica surgió en la última exposición, cuando María Cristina Área, del Programa de Investigación de Celulosa y Papel de la Universidad Nacional de Misiones, se manifestó a favor de la instalación de las plantas de pasta de celulosa en Fray Bentos, frente a la localidad entrerriana de Gualeguaychú.
La especialista explicó las nuevas técnicas con que trabajan las empresas y se refirió a las mejores tecnologías disponibles para la producción de pulpa y papel de eucaliptos, y planteó los mitos y realidades que rondan sobre el real impacto de esta industria.
En ese sentido, Área destacó el proyecto Botnia y aseguró que la empresa finlandesa cumplirá con las máximas exigencias internacionales en materia ambiental, al expresar que “visité personalmente la empresa semanas atrás para venir informada a este foro. Me interioricé sobre el tipo de proceso, características tecnológicas y analice cada punto del proyecto. Lo que puedo asegurar- sin poner la mano en el fuego por nadie- es que se trata de un proyecto que contará con las mejores tecnologías disponibles, cumple en cada uno de los puntos, y tiene la directiva de cumplir con las normas ambientales que rigen en la comunidad económica europea, que son muy exigentes”.
La catedrática misionera fue más allá al expresar que “no sólo van a cumplir con la legislación uruguaya, que es tan deficiente como la de Argentina, sino que tienen el compromiso de cumplir normas y estándares de calidad internacional”, al tiempo que destacó que “hay un estudio de impacto ambiental realizado, y está todo muy bien ajustado. Lo importante será el control que ejerza el Estado uruguayo una vez puesta en marcha”.
De las charlas también participó el licenciado Gustavo Braier, quien anticipó problemas entre Corrientes y Entre Ríos en materia forestal al referirse a las perspectivas del sector forestal de ambas provincias, la percepción de los inversores, y las debilidades que se enfrenta como país ante la falta de un plan nacional para impulsar una política de promoción de la actividad.
Braier señaló que “la cuenca forestal de eucaliptos más importante de Argentina se encuentra sobre la margen del río Uruguay y está compartida entre Corrientes y Entre Ríos, pero una utilización indebida de los recursos puede volverla no competitiva e ineficiente”, por lo que “se necesita en la región inversiones de industrias de gran escala”.
En los últimos meses, y debido a una disputa acerca de efluentes de fábricas de pulpa entre Argentina y Uru-guay, el gobierno de Entre Ríos se declaró, mediante la promulgación de la ley 9.644, como provincia libre de plantas procesadoras de pasta celulósica cuya actividad industrial impacte en el medio ambiente. “En la misma zona, el gobernador de Corrientes manifiesta el deseo de contar con dicha cuenca en su provincia. Sin dudas, la decisión de Entre Ríos va a causar muchas dudas a cualquier inversor extranjero que decida invertir en Corrientes, a la vez que a cualquier proyecto industrial de pulpa o papel que utilice el Río Uruguay va a tener que enfrentarse con dificultades adicionales”, estimó Braier.
En ese sentido, el secretario de la Producción de la provincia, Daniel Welschen, reconoció la preocupación del gobierno entrerriano porque “asumimos que se va a instalar una fábrica como la proyectada por Botnia, en la provincia de Corrientes”, y señaló que para la provincia ubicada al norte de Entre Ríos la instalación de una papelera implicaría un aumento de la exportación 475 millones de dólares.
Fuente: Misiones on line
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