Hoy aparece en todos los medios periodísticos de la Provincia de Mendoza y con bombos y platillos, el triunfo sobre un flagelo que ha mantenido en vilo a gran parte de la economía fruti-hortícola de la Provincia.. Me estoy refiriendo al anuncio sobre la “ganada” guerra contra la temible “Mosca del Mediterráneo”.
Ahora, ¿donde está la incoherencia? Todo el mundo aquí sale triunfalmente, en especial los que directamente reciben este beneficio, a aplaudir esta batalla ganada por el ISCAMEN que es el ente de control en este tipo de problemática, pero nadie se ha percatado que, gra-cias a los años de investigación científica y preocupación de Profesionales y Técnicos de la CNEA, quienes desarrollaron y aplicaron la metodología de Irradiación sobre la temible mosca.
Son ellos quienes fueron y serán realmente los que logran el triunfo, y luego, por otro lado, se combate la reapertura del Yacimiento de Uranio de Sierra Pintada, origen de la materia prima que suministró el combustible para los reactores de donde salen los radioisótopos utilizados para estas técnicas y donde se ha tenido el mismo cuidado desde todo punto de vista en el manejo de los distintos procesos, tanto científicos exploratorios, en la búsqueda de este importante elemento como en los cuidados extractivos en la minería correspon-diente.
¿No es esto incoherente?, ¿A qué Jugamos y a quienes creemos?.
Raúl A. Roldán
Mendoza
L.E 4.972.101
NOTA de FAEC: El método empleado consiste en la irradiación de miles y miles de pupas o larvas de mosca, con dosis controladas de radioactividad que no son letales pero causan infertilidad en las moscas. Cuando esas moscas llegan al estado de adultez son liberadas al ambiente en zonas infestadas por la plaga. Se sostiene que las moscas macho estériles se acoplan con las hembras fértiles y éstas no pondrán huevos y las moscas no se reproducirán.
Este método fue desarrollado y aplicado en gran escala en California en los primeros años de la década de los 80, cuando el gobernador Brown se negaba a rociar las plantaciones con Mala-thion (un insecticida eficaz e inocuo), a causa de las fuertes presiones de las organizaciones ecologistas. Se irradiaron cientos de miles de moscas en Perú y se liberaron en los fértiles valles de California, donde la mosca (o Medfly, como se conoce allí) había logrado que toda la produc-ción frutihortícola del estado estuviese prohibida de exportar o enviar a ostros estados de la Unión –nadie la quería comprar, en realidad, pero las autoridades no querían arriesgarse a que la Medfly se extendiese al resto del país.
Todo parecía funcionar bien y la peste comenzó a reducirse. Los inspectores ponían cajas cebos para atrapar moscas y comprobar si eran fértiles o estaban a punto de poner huevos. El progra-ma basaba su teoría en que las moscas se acoplan sólo una vez y no se acoplarán más después de una fertilización fallida. Pero dos semanas después, cuando se creía que la peste había sido derrotada, un horticultor llamó desesperado a los inspectores para decir que había hallado un árbol entero plagado de larvas de moscas. Sólo hizo falta que una sola mosca macho fértil hallase una única hembra fértil para que el ciclo de infestación se reprodujese.
Para hacer una historia larga lo más corta posible, finalmente el gobernador accedió a que el Programa de Erradicación de la Medfly comenzara a rociar Malathion con sus helicópteros y avionetas fumigadoras. Nadie resultó dañado. Para probar la inocuidad del insecticida, el jefe del programa de lucha contra la mosca reunió a las cámaras de TV, sacó el líquido listo para rociar, llenó un vaso y se lo bebió a “fondo blanco”. Años después dijo: “Tenía un sabor horrible, pero no me causó ningún problema de salud.”
Esa ha sido la manera en que California se liberó de la Mosca del Mediterráneo, y aunque el sistema de irradiación de larvas es una alternativa viable, y conveniente, siempre está el riesgo de que se encuentren un macho y una hembra fértiles para que todo el programa de erradicación de la mosca se vaya a los caños.
El futuro dirá (en pocos días más) si el programa ha dado resultado y la mosquita ha sido real-mente eliminada en Mendoza. Mientras tanto, tenemos nuestras serias dudas del futuro éxito del método. Ojalá que nos equivoquemos. Crucemos los dedos…
Eduardo Ferreyra
FAEC
Vea aquí otras interesantes
estadísticas de la página