¿Qué es El Niño/Oscilación del Sur?
El Niño/Oscilación del Sur es el resultado de un calentamiento y enfriamiento cíclico de la superficie del océano en el Pacífico Central y Oriental. Esta región del océano es normalmente más frío que lo que su ubicación ecuatorial podría sugerir, principalmente debido a la influencia de los vientos del noreste, de una corriente oceánica fría que fluye hacia el norte por la costa de Chile, y de la subida de agua fría en la costa de Perú.
A veces, la influencia de estas fuentes de agua fría disminuye, causando que la superficie del Oceáno Pacífico Central y Oriental se caliente bajo el Sol del trópico - esto se conoce como un evento El Niño. Esto causa fuertes lluvias en América del Sur, pero severas sequías en Australia oriental. Mientras más intenso es El Niño. más severas son las sequías en Australia.
En otras ocasiones, la inyección de aguas frías se hace más intensa que lo usual, provocando que la superficie del Océano pacífico oriental se enfríe - esto se conoce como un evento La Niña. Esto provoca sequías en América del Sur y pesadas lluvias e inundaciones en la Australia oriental. De esta manera Australia experimenta su característico ciclo de sequías e inundaciones - todas causadas por el ciclo de El Niño-La Niña descritas más arriba.
Para una información más detalla sobre El Niño, vea el sitio web Queensland DNR `Long Paddock', y el sitio NOAA El-Niño Página Temática.
El último Temperaturas Globales de la Superficie del Mar de la Universidad de Wisconsin-Madison (derechos reservados). Nótese de manera particular las temperaturas del océano en el Pacífico Oriental cerca de Ecuador, perú, y las islas Galápagos, la fuente de la Oscilación del Sur/El Niño.
¿Por que se llaman así "El Niño" y "La Niña"?
"El Niño" es llamado así a causa de la festividad Navideña Peruana cuando ocurre el calentamiento muy cerca de la fecha del nacimiento de El Niño Dios. Por ello los meteorólogos bautizaron a la Oscilación del Sur como El Niño, o abreviado ENSO, por sus siglas en inglés, "El Niño/Southern Oscillation" El fenómeno inverso, el enfriamiento de las aguas orientales del Pacífico, fue llamado primero "el anti-El Niño", hasta que alguien se dio cuenta que esto quería decir literalmente el "Anti-Cristo"! Para evitar esta desafortunada connotación se rebautizó como "La Niña".
¿Qué es el Índice Oscilación del Sur?
Se ha descubierto que el calentamiento y enfriamiento cíclico del Pacífico central y oriental deja su nítida huella digital en la presión del nivel del océano. De modo particular, cuando la presión medida en Darwin se compara con la la medida en Tahiti, la diferencia entre ambas puede usarse para generar un número "indice". Cuando se trata de un número positivo, tenemos una La Niña (o enfriamiento del oceáno)m pero cuando el número es negativo tenemos un El Niño (un calentamiento de las aguas).
Este es el Índice Mensual de la Oscilación del Sur desde Enero de 2001 hasta Abril 2003.
Este es el Índice El Niño/Oscilación del Sur para los últimos 30 días, hasta el 30 de abril de 2003.
(Estos tres gráficos serán actualizados de modo regular)
Para una perspectiva a más largo plazo, aquí está el Índice de Oscilación del Sur (IOS) desde 1950.
¿Que nos dice el índice IOS?
En el caso de Australia, un IOS negativo significa que está en progreso un El Niño, y que por ello deben esperarse condiciones de sequía en el oriente de Australia. Mientras más negativo sea el número, más hacia el sur se extenderá la sequía. Por ejemplo, el severo El Niño de 1982-83 fue afortunadamente de corta vida, pero su intensidad fue tal (como se ve en la profunda caída en el gráfico) que aún regiones tan al sur como Tasmania fueron afectadas severamente por la sequía.
Al revés, el período den 1988 cuando el índice se hizo positivo, indicando un fuerte evento La Niña, se vió acompañado en Australia por severas inundaciones en Queensland y Nueva Gales del Sur. En 1996, tuvimos otra la Niña, aunque más suave que la de 1988. Sin embargo, como resultado de esto hubo extensas lluvias en la Australia oriental en 1996. La reciente La Niña de 1998/2001 transcurrió de manera acostumbrada, con lluvias más abundantes que lo normal en toda Australia.
El período desde 1991 hasta 1995 fue un El Niño más débil que el evento de 1982/83, pero fue mucho más duradero. El efectode esto fue que los estados sureños como Victoria y Tasmania no fueron afectados seriamente por la sequía, debido a la debilidad del evento, pero Queensland y Nueva Gales del Sur sufrieron una larga y prejudicial sequía durante los cuatro años del El Niño. La Niña de 1996 trajo un muy bien venido alivio. El Niñi regresó otra vez a mediados de 1997, comenzando con un calentamiento de la superficie del océano en perú y Ecuador, seguido a mediados de 1999 por el retorno de La Niña.
En otras palabras, son la intrensidad de un evento y su duración los que determinan quienes recibirán sequías y quienes tendrán inundaciones, y durante cuánto tiempo.
¿Y que hay en reserva para el resto del 2002? Un modelo solar publicado por el Dr Theodor Landscheidt publicado en este sitio hacen ya tres años, haga click aquí para el "paper" completo en inglés, y aquí para un resumen en Castellano, mostrando que El Niño de 1998-99 duraría hasta el final de 1999 (como realmente sucedió), con el siguiente El Niño significativo haciendo su pico a fines de 2000. Ahora que La Niña ha mermado, estamos de vuelta en un patrón de El Niño desde principios de 2002, con condiciones de sequías extendiéndose a lo largo y ancho de Queensland y Nueva Gales del Sur. Es probable que esto cintinúes hasta el fin de este año 2002 hasta los primeros meses del 2003 (NOTA de FAEC: esta página, traducida en Abril del 2003, demuestra la precisión de la predicción: sucedió exactamente como lo pronosticó el Dr. Landscheidt!) Se aconseja a los granjeros consultar con su Oficina Local de meteorología antes de tomar decisiones a largo plazo que podrían ser afectadas por sequías o fuertes lluvias, y mantenerse pendientes de las últimas informaciones y pronósticos de la oficina de meteorlogía sobre el actual El Niño.
la investigación sobre el ENSO es un asunto de interés nacional para Australia y merece la porción más grande de cualquier investigación sobre el clima. Pocos países tienen un interés tan comprometido con el El Niño como lo tiene Australia, y no contribuirían con los fondos necesarios para una investigación y predicción exitosa. Este es un fuerte argumento para que Australia no malgaste sus limitados recursos en el Calentamiento (un tema que ya está saturado de investigación por parte de otros países desarrollados, y que muy problemante se demuestre como un problema inexistente, de todas maneras), sino que debería enfocar en esos fenómenos climáticos que impactan directamente sobre nuestros intereses nacionales.